La caida del «cabal «


«Cuando la fe se vuelve ansia se produce el milagro.»
Este documental fue hecho por la investigadora autora janet observar de los países bajos con la ayuda de incontables colaboradores y una vez de todo el mundo contiene millas de horas de investigación los invito a no aceptar nada como la verdad por favor haga sus propios investigaciones y quien quien todo Lo que les presento esta es la única manera de despertarse en verdad y convertirse en una advertencia le pido que estamos por atestiguar uno de los más grandes eventos en la historia humana el mundo como lo conocemos está desmoronando ante nuestros propios ojos y la mayoría de la población mundial.
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Efectos adversos de las vacunas para el COVID-19 admite la Agencia del Medicamento
¡ATENCIÓN! Muy posibles efectos adversos de las vacunas para el COVID-19 que admite la Agencia del Medicamento de Estados Unidos: Infartos, convulsiones, trombos…
Una presentación de la FDA (Agencia de Medicamentos y Alimentos) de Estados Unidos ha hecho un listado (sujeto a modificaciones) de los posibles efectos adversos de la vacuna contra el coronavirus que no deja indiferente a nadie.
El documento, publicado en la web de la FDA, y también disponible para su lectura y descarga más abajo, enumera en su página 16 un listado de posibles reacciones a la vacuna «sujetas a modificaciones» que causa pavor.
-Síndrome de Guillain-Barré
-Encefalomielitis diseminada aguda
-Mielitis transversa
-Encefalitis/mielitis/encefalomielitis
-Meningoencefalitis/Meningitis
-Encefalopatía
-Convulsiones/ataques
-Accidente cerebrovascular
-Narcolepsia y cataplejía
-Anafilaxia
-Infarto agudo de miocardio
-Miocarditis/pericarditis
-Enfermedad autoinmune
-Muerte
-Aborto espontáneo
-Otras enfermedades desmielinizantes agudas
-Reacciones alérgicas no anafilácticas
-Trombocitopenia
-Coagulación intravascular…

Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de salir a luz Marcos 4:22


Hace muchos años me contaron la historia ejemplar de un monje que desde su celda en la montaña llegó a inventar un procedimiento infalible para aprovechar la energía de las olas del mar, pero cuando le llevaron a la costa enseguida se dio cuenta de que ese mar no le servía.
Para cualquier buen patriota caer en la cuenta de la España que tenemos puede dar lugar a un desengaño tan grave como el del buen monje. Unas pinceladas sobre el caso: según se ha dicho, las dos mayores búsquedas en Google durante 2020 fueron “la isla de las tentaciones” y algo así como la máscara de no se quién, dos programas de TV. Los loteros calculan que se venderá un 30% menos de lotería de Navidad. El Gobierno no se ha enterado de que los E.E.U.U. iban a reconocer la soberanía de Marruecos sobre el Sahara occidental, antigua colonia abandonada por España en forma poco gloriosa. Se podrían multiplicar los ejemplos que indican que somos un país de chirigota sin necesidad de recurrir al notorio desmadre político sanitario a cuenta de la pandemia o a nuestra incapacidad de contar los fallecidos de manera aseada.
Con este panorama es difícil ser optimista, pero hay que intentarlo porque son muchos los testimonios que indican que los españoles podemos consentir, esa creo que sería la palabra adecuada, que la situación política se siga deteriorando, que las colas de los que tienen que pedir para comer superen a las de la posguerra, y que el español deje de hablarse incluso en La Rioja a cuenta de que también parece la cuna del vascuence.

Con este panorama es difícil ser optimista, pero hay que intentarlo porque son muchos los testimonios que indican que los españoles podemos consentir, esa creo que sería la palabra adecuada, que la situación política se siga deteriorando, que las colas de los que tienen que pedir para comer superen a las de la posguerra, y que el español deje de hablarse incluso en La Rioja a cuenta de que también parece la cuna del vascuence. Pues bien, con una panorama tan poco halagüeño tenemos un presidente de Gobierno que ha hecho punto bobo en dos direcciones y ha conseguido nada menos que 188 votos para la ley de presupuestos, una pasada. La nueva separación entre la España oficial y la España real está adquiriendo un aspecto esperpéntico mientras no acaba de dibujarse con la debida nitidez una propuesta política capaz de poner de acuerdo en algo positivo a los muchos sectores que parecen abandonados a la desesperación.
Puede que nuestro sonriente timonel vuelva a hacer una de las suyas, no sería la primera vez, y dibuje un panorama de alianzas muy distinto, pero también puede que no, y lo más lógico sería pensar en que la fórmula que le ha permitido pasar de 123 a 188, lo que supone un incremento mayor del 50% sobre lo que tenía, le parezca un negocio muy promisorio mientras el vecindario se lo consienta. Sánchez ha acreditado algo más que habilidad y seguro que él mismo es quien más valora esta virtud que tanto lo adorna, de forma que solo un exceso de virtuosismo sobre el alambre, con el riesgo de desnucarse, le llevará a ensayar por su derecha la «geometría variable» para romper con la política de bloques que tan pingües beneficios le ha dado, hasta ahora.
Es absurdo perder el tiempo especulando con las capacidades de Sánchez, mientras sigue pendiente la nada pequeña cuestión de qué han de hacer los demás, los muchos excluidos, sin olvidar ni al PNV, para que sea no ya posible sino imaginable una alternativa que llegue a la mayoría, porque la fórmula Sánchez asegura que, si no se llega a los 176 diputados, no habrá nada que hacer, un panorama que ha explicado con su maestría habitual Ignacio Varela. En 2020 hemos descubierto, por decirlo así, que el sistema electoral tiene estas servidumbres y es de aurora boreal pretender cambiarlo, de forma que la imaginación y el arrojo deberán acudir en ayuda de los aspirantes a llevar el pedrusco de Sísifo hasta la pendiente contraria, una tarea hercúlea para la que restan, al menos, tres años.
Es posible que si en estos tres años los zarpazos del Covid y de la crisis se tratan con la chapucería habitual el desastre no pueda ser atribuido al maestro armero, y esto le pase a Sánchez una factura para cuyo pago el BCE no le de suficiente crédito, pero tampoco es seguro que entre relatos y lamentaciones no se consiga lograr que el mal de muchos, nunca de todos, se convierta en consuelo de gobernantes, conforme a la reformulación que hizo Pemán del conocido refrán. Pero no basta con que las cosas le vayan mal a uno para que le vayan mejor al adversario, en política no rige ese principio aritmético de compensación, hace falta que el aspirante se haga visible, creíble y esperanzador, y eso, en la España que tenemos, ni es fácil ni lo puede hacer cualquiera.
En la historia política desde 1977 para acá, la derecha ganó por dos veces a la primera y ha vuelto a ganar otras dos veces en circunstancias de notorio desgaste de una izquierda que, en buena medida, ya no existe. Ahora, la izquierda que se ha hecho real tiene mucho poder y lo usa con denuedo, además de que parte de una situación política de enorme desfondamiento moral para el electorado conservador y/o liberal que se debe al legado de Rajoy, de forma que la alternativa política tendrá que formularse de manera bastante nueva y seductora porque ha perdido de manera irremisible buena parte de sus electores, los más críticos en cualquiera de los sentidos de esta expresión. No es una tarea imposible, pero sí muy difícil y que no parece inteligente posponer a la espera de que el bombo de la fortuna gire sin causa cierta.
Esta es la España que tenemos, una España sin el menor prestigio ni papel internacional, sin modelo económico claro, con unos presupuestos que la mayoría de los economistas, al margen de su sesgo ideológico, consideran inconsistentes con la situación económica, con la monarquía y la Constitución en el punto de mira de los populistas-leninistas, con una enorme cantidad de personas condenadas a una pobreza que creíamos cosa del pasado y con una herida territorial a la que Sánchez le está dando, en el fondo, un tratamiento tan evasivo como pusilánime y equívoco.

En tiempos tan recios como los presentes, quien quiera aspirar a cambiar la historia, deberá empezar sin tardanza a hacerse notar, sin limitarse a decir lo que no gusta, sin quejarse por haber perdido el poder, sin refugiarse en ritmos y evasivas, sin excusarse porque su partido no está listo para una larga marcha, sin apropiarse de fórmulas del adversario, sin miedo a perder, porque lo peor que le puede pasar a un país que está otra vez sin pulso es que nadie se atreva a iniciar en serio una nueva etapa que restaure la confianza de los españoles en la libertad y en sus propias fuerzas para dejar de ser los campeones del mundo de la mediocridad.

Y en España…
Los políticos roban, mienten y empujan el país hacia el abismo, el jefe del Estado se queda quieto frente al caos, los militares agachan la mirada en sus cuarteles, los periodistas desinforman y se someten a los poderosos, los jueces son parciales y responden a influencias eternas inconfesables, el gobierno malgobierna, los ciudadanos soportan vejaciones, injusticias y esclavitud, los independentistas acuchillan a España y desobedecen las sentencias judiciales, el gobierno se rodea de partidos que odian a España y rechazan la democracia, los partidos políticos no respetan la democracia.
Los políticos roban, mienten y empujan el país hacia el abismo, el jefe del Estado se queda quieto frente al caos, los militares agachan la mirada en sus cuarteles, los periodistas desinforman y se someten a los poderosos, los jueces son parciales y responden a influencias eternas inconfesables, el gobierno malgobierna, los ciudadanos soportan vejaciones, injusticias y esclavitud, los independentistas acuchillan a España y desobedecen las sentencias judiciales, el gobierno se rodea de partidos que odian a España y rechazan la democracia, los partidos políticos no respetan la democracia y no defienden el bien común, el dinero se despilfarra, la corrupción sigue galopando, el país está llene de ineptos con poder… En España nadie cumple con su deber.
Leyes inicuas, como las de género, que discriminan al hombre y benefician a la mujer, y las que protegen a los okupas, ladrones de viviendas con blindaje, entre otras muchas, siguen vigentes sin que nadie las anule o reforme.

De nada sirve en España que la opinión pública quiera algo si los partidos políticos quieren lo contrario. La voluntad popular vale menos que un excremento de perro en las calles. Mas de medio país grita “Sánchez vete ya”, pero el inepto arrogante sigue en su puesto, indiferente al clamor. Otra parte importante de la sociedad exige que los comunistas incrustados en el gobierno sean expulsados del poder, pero ese deseo tampoco se cumple. En España prevalece siempre la voluntad de los poderosos sobre la soberanía popular, lo que convierte a esta nación en un estercolero.
No hay sociedad civil, ni organizaciones independientes al margen de la política, como exige la democracia. Hasta las universidades están controladas por el Estado, cuyo poder penetra en los ámbitos propios de la ciudadanía como las asociaciones, cofradías, fiestas populares, etc. España, que se proclama democracia, es una tiranía de hecho, tan autoritaria como Cuba o Venezuela, aunque por ahora sin represión sangrienta.

Los poderes básicos del Estado, que tienen que funcionar libre e independientemente en democracia, están sometidos al poder Ejecutivo y a los partidos políticos. Los diputados y senadores son muñecos de trapo manejados por sus partidos y el Congreso y el Senado, en lugar de ser templos del debate libre, son ridículas palestras para las peleas y para la obediencia ciega a las consignas y órdenes de los líderes.
Pero hay más ejemplos escandalosos de incumplimiento del deber: jueces sometidos y parciales, policías que cumplen órdenes inicuas, políticos divorciados del pueblo al que dicen representar, inspectores corrompidos, delincuentes con mucho poder instalados en los palacios y ministerios y la carrera política convertida en un refugio para arribistas, corruptos y rufianes.
Pero en todo este lamentable estado de suciedad y fracaso, quien incumple su deber de manera más vergonzosa y triste es el pueblo, que en democracia obligado a vigilar, criticar y controlar a los políticos, pero a los que, por dejadez y cobardía, les ha permitido convertirse en depredadores de la nación y del bien común, en ladrones y destructores de la libertad, la justicia y la democracia.
España, Especial 8 meses
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LA GRAN VERDAD FINAL Q (PARTE 10 de 10)
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ORGANIZACION MUNDIAL DE LA ENFERMEDAD
La VERDADERA HISTORIA de la OMS
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VUELVE LA TUNA Y LOS TUNANTES








Yugos os quieren poner..

Los bueyes doblan la frente,
impotentemente mansa,
delante de los castigos:
los leones la levantan
y al mismo tiempo castigan
con su clamorosa zarpa.
No soy un de pueblo de bueyes,
que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones,
desfiladeros de águilas
y cordilleras de toros
con el orgullo en el asta.
Nunca medraron los bueyes
en los páramos de España.
Salve, Bandera de mi Patria, salve,
y en alto siempre desafía al viento,
tal como en triunfo por la tierra toda
te llevaron indómitos guerreros.
Tú eres España, en las desdichas grande,
y en ti palpita con latido eterno
el aliento inmortal de los soldados
que a tu sombra, adorándote, murieron.
Cubres el templo en que mi madre reza,
las chozas de los míseros labriegos,
la cuna donde duermen mis hermanos,
la tierra en que descansan mis abuelos.
Por eso eres sagrada, en torno tuyo,
a través del espacio y de los tiempos,
el eco de las glorias españolas
vibra y retumba con marcial estruendo.
Salve, Bandera de mi Patria, salve,
y en alto siempre desafía al viento,
manchada por el polvo de las tumbas,
teñida con la sangre de los muertos.
¿Quién habló de echar un yugo
sobre el cuello de esta raza?
¿Quién ha puesto al huracán
jamás ni yugos ni trabas,
ni quién al rayo detuvo
prisionero en una jaula?
Asturianos de braveza.
vascos de piedra blindada,
valencianos de alegría
y castellanos de alma,
labrados como la tierra
y airosos como las alas;
andaluces de relámpagos,
nacidos entre guitarras
y forjados en los yunques
torrenciales de las lágrimas;
extremeños de centeno,
gallegos de lluvia y calma,
catalanes de firmeza,
aragoneses de casta,
murcianos de dinamita
frutalmente propagada,
leoneses, navarros, dueños
del hambre, el sudor y el hacha,
reyes de la minería,
señores de la labranza.
hombres que entre las raíces,
como raíces gallardas,
vais de la vida a la muerte,
vais de la nada. a la nada:
yugos os quieren poner
gentes de la hierba mala,
yugos que habréis de dejar
rotos sobre sus espaldas.
Crepúsculo de los bueyes
está despuntando el alba.
Oigo, patria, tu aflicción,
y no entiendo por qué callas,
viendo a traidores canallas
despedazar la nación.
Dando a un ingrato felón
estúpidas concesiones,
están haciendo jirones
esta tierra milenaria,
de gente, ayer solidaria,
hoy podrida de ambiciones.
Lloras, porque te engañaron
los que lealtad prometieron,
los mismos que te aplaudieron,
y la Ley corroboraron.
Alevosos, traicioneros,
bellacos y desleales,
la convivencia entre iguales
rompen con su felonía,
y han de acabar la porfía,
en inmundos cenagales.
Buscando solo engañar,
distorsionaron la historia
para turbar la memoria
de las gentes del lugar.
Anhelantes por medrar,
con su estúpida insolencia,
rompieron la convivencia
entre familias y amigos;
requiere firme castigo
su ruin malevolencia.
Un tipo poco honorable
quiso imponer sus ideas
con maneras maniqueas,
fraudulentas, miserables,
arteras y despreciables.
Medio milenio hermanados
no lo separa un tarado
dirigente provinciano,
por mucho discurso vano
que largue desde su estrado.
¡Basta! Gritó el pueblo fiel
por toda la piel de toro.
¡Basta! Clamaron a coro
los españoles de bien.
¡Basta! Poned pie en pared
a tanta provocación
y cortad la humillación
de estos cuatro hijos de perra,
¡No se trocea esta tierra,
somos una gran nación!
Fieles paisanos, honrados,
que queréis que vuestro nietos
os recuerden con respeto
por haberles entregado
un país fuerte y aunado.
¡Levantaos, despertad!
Negad la eventualidad
de una España fragmentada
y levantad vuestra espada
contra tanta indignidad.

Y si tu mueres por ella
ella será tu mortaja
tu cuerpo descansará
en los brazos de la patria.

Dictadura criminal en España / Fraude en U.S.A.

Poder en la sombra

El exterminio empezará en España

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Una invasión sin precedentes (Jack London)

El Nuevo Orden Mundial




Sal de la Matrix / Get out of Matrix

Entras en Youtube a ver un vídeo y al final acabas reproduciendo la lista que te va recomendando: explicaciones pseudocientíficas, teorías conspiranoicas, remedios para enfermedades que no tienen ninguna validez… El contenido que aparece no es casualidad. Los anglosajones llaman a este fenómeno ‘la madriguera del conejo’. Hoy en La Ventana, el periodista Javier Salas nos explica por qué y cómo sucede esto.
En el reportaje para El País que publican hoy Jordi Pérez Colomé y Javier Salas, Así caemos por la espiral tóxica de Youtube, extraen una serie de conclusiones sobre este buscador. “El algoritmo detecta que lo que nos gusta son determinadas cosas que nos mantienen más tiempo viendo vídeos”, cuenta Salas. Por eso, “los primeros contenidos son legítimos”, pero luego te muestran los que saben que te van a enganchar, aquellos en los que justo lo que quieres escuchar está al final.
El problema de esto es que esos vídeos que atrapan al usuario suelen contener mensajes xenófobos, falsos o extremistas. “Todo lo que ha pasado de radicalización de gente en otras redes sociales terminaba en un enlace a Youtube que es donde te daba la charla entera”, comenta Javier.
La temática de los contenidos ‘ilegítimos’ depende de cada país, “nuestro fenómeno ha sido siempre más el de la salud que el del extremismo político que, por ejemplo, en Estados Unidos sabemos que ha radicalizado a gente que ha cometido atentados”, declara Salas.
Entras en Youtube a ver un vídeo y al final acabas reproduciendo la lista que te va recomendando: explicaciones pseudocientíficas, teorías conspiranoicas, remedios para enfermedades que no tienen ninguna validez… El contenido que aparece no es casualidad. Los anglosajones llaman a este fenómeno ‘la madriguera del conejo’. Hoy en La Ventana, el periodista Javier Salas nos explica por qué y cómo sucede esto.
En el reportaje para El País que publican hoy Jordi Pérez Colomé y Javier Salas, Así caemos por la espiral tóxica de Youtube, extraen una serie de conclusiones sobre este buscador. “El algoritmo detecta que lo que nos gusta son determinadas cosas que nos mantienen más tiempo viendo vídeos”, cuenta Salas. Por eso, “los primeros contenidos son legítimos”, pero luego te muestran los que saben que te van a enganchar, aquellos en los que justo lo que quieres escuchar está al final.
El problema de esto es que esos vídeos que atrapan al usuario suelen contener mensajes xenófobos, falsos o extremistas. “Todo lo que ha pasado de radicalización de gente en otras redes sociales terminaba en un enlace a Youtube que es donde te daba la charla entera”, comenta Javier.
La temática de los contenidos ‘ilegítimos’ depende de cada país, “nuestro fenómeno ha sido siempre más el de la salud que el del extremismo político que, por ejemplo, en Estados Unidos sabemos que ha radicalizado a gente que ha cometido atentados”, declara Salas.
Como a más minutos de visualización, más publicidad te pueden mostrar, la plataforma no ha tomado medidas: “En Youtube hace tiempo se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo y ellos tomaron la decisión de no tratar de domar el algoritmo, de no evitar que nos mostrase esos vídeos extremistas porque era el modelo de negocio, porque así se están forrando” expone el periodista.
Es posible que quien reproduce ese contenido tenga muy claro que es una falacia, pero, como dice Javier Salas, “simplemente con estar expuestos a ese tipo de vídeos ya empieza a resonar tu conciencia de lo que es la realidad. Empiezas, por lo menos, a perder confianza”.
Philip K. Dick dijo en una conferencia en 1977: «Vivimos en una realidad programada computacionalmente y la única pista que tenemos es cuando una variable es cambiada y una alteración en nuestra realidad ocurre». Sus ideas prefiguran indudablemente la noción desarrollada en la trilogía The Matrix. Una serie que, como ha notado el profesor Robert Thurman, tiene notables influencias budistas (la Matrix del budismo se llama samsara) y que ha producido la gran metáfora de nuestro tiempo para referirse a una sensación milenaria: la sospecha de que el mundo que experimentamos convencionalmente es una ilusión. En su laberíntica y obsesiva reflexión en torno a una serie de visiones místicas que ocurrieron el 2/3/1974, plasmadas en The Exegesis, curiosamente Dick, un gnóstico cristiano, da como posible escapatoria a este dédalo ilusorio que hoy llamamos La Matrix el camino del bodhisattva. Dick cuenta sobre el protagonista de un texto que pensaba titular The Owl:
Sólo escapa verdaderamente del laberinto cuando decide regresar voluntariamente (volverse a someter al poder del laberinto) para beneficiar a aquellos que siguen atrapados dentro de él. Esto es, nunca puedes irte tu sólo, para salir debes de elegir llevar a los demás… ésta es la paradoja última del laberinto, la ingenuidad quintaesencial de su construcción, que la única vía de salida es una vía de regreso voluntaria (al interior de su poder), que es lo que constituye el sendero del bodhisattva.
Confirmado, Ana Oramas es una meapilas, ella es la que mas ora, mea y la caga
Sólo faltó la cabra de la Legión
Este tipo, Terrorista de derechas se auto-inmolará tras la votación
Grandes Pajos Reales
OPINION GENERAL
Todos los partidos votados son legitimos
«Dejadlos; son ciegos y guías de ciegos. Y si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en el hoyo» (MT. 15,14).

Conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres, Juan 8:31-38








Nada hay cuidadosamente ocultado que no haya de revelarse
ni secreto que no llegue a saberse”. Evangelio de Lucas 12:2
Quis custodiet ipsos custodes?
La Religión mediante la deshumanización de las personas
las comvierten en borregos del Sistema. Superduque
„Es detestable esa avaricia espiritual que tienen los que sabiendo algo,
no procuran la transmisión de esos conocimientos.“ Miguel de Unamuno



Más allá de la física

En física de partículas existe el denominado modelo estándar, que describe muy bien las partículas elementales hasta hoy conocidas, como son los quarks (los que componen los protones y neutrones que forman el núcleo atómico) y los leptones, como el electrón. Además, este modelo es capaz de describir las interacciones fundamentales a nivel subatómico entre estas partículas.
Partículas subatómicas | |||
Partícula | Símbolo | Carga eléctrica | Masa |
Electrón | e- | -1,602 × 10-19 C | 9,109 × 10-31 kg |
Protón | p+ | +1,602 × 10-19 C | 1,673 × 10-27 kg |
Neutrón | n± | 0 | 1,675 × 10-27 kg |
Actualmente, sabemos que las partículas subatómicas pueden estar formadas por otras partículas más pequeñas. Por ejemplo, los protones y los neutrones están compuestos por unas partículas más pequeñas denominadas quarks.
Sin embargo, cuando los físicos creen que están cerca de la solución final, aparecen nuevos fenómenos naturales que desafían nuestra imaginación y terminan cuestionando lo que creían seguro. Ahora aparecen evidencias que permiten inferir la existencia de un nuevo tipo de materia que llamamos materia oscura, dado que al parecer no emite luz como la materia ordinaria y de ahí nuestra dificultad actual para detectarla directamente.
De otro lado, evidencias experimentales en astrofísica señalan la existencia de un tipo de energía denominada energía oscura, que estaría acelerando la expansión del Universo. Vale aclarar que el término ‘oscuro’ no tiene ninguna implicación esotérica o de otro tipo que no sea nuestra dificultad actual para detectar experimentalmente fenómenos únicamente asociados a emisiones de luz o fotones. Lo interesante es que una vez reunimos todos los datos, la materia oscura y la energía oscura terminan siendo alrededor del 95 % del Universo. En otras palabras, tenemos evidencia experimental directa solo del 5 % de las partículas fundamentales de lo que existe, descritas en el modelo estándar de partículas.
Los esfuerzos por determinar el tipo de materia oscura que compone el Universo no se detienen y desde diferentes frentes de la física, en especial con experimentos astrofísicos, se busca la materia oscura. En el Gran Colisionador de Hadrones (LHC), del Cern, se chocan protones a velocidades cercanas a la velocidad luz, y en el detector LHCb, específicamente, se busca evidencia, vía interacciones cuánticas virtuales, de nuevos tipos de materia. Para ello se utiliza la enorme cantidad de datos que surgen de los procesos de decaimiento de mesones B (compuestos de dos quark) y se analizan con precisión para poder inferir estas nuevas interacciones.
El pasado mes de abril, el experimento LHCb reportó anomalías en los decaimientos de mesones buenos, neutros y cargados eléctricamente en diferentes regiones de energía, que sugieren la existencia de nuevas interacciones no descritas en el modelo estándar de partículas aceptado actualmente. La carrera por entender el Universo en su complejidad continúa, y sin duda es un camino que nos depara muchas sorpresas.







Todo sea por negocio

La experimentación con animales
La experimentación con animales es uno de los temas más polémicos y que levantan algunas de las discusiones más acaloradas, ya que las implicaciones que se derivan se extienden a científicos, legisladores y especialistas en ética. Art. (2008)
La experimentación con animales es uno de los temas más polémicos y que levantan algunas de las discusiones más acaloradas y apasionadas, ya que las implicaciones que se derivan no se reducen al ámbito animalista, sino que se extienden a científicos, legisladores, estudiantes, industrias, opinión pública y medios de comunicación.
Es muy difícil permanecer impasible ante según qué protocolos experimentales, ya que el gran dilema que se presenta es ¿hasta qué punto es lícito, o científica y éticamente aceptable, llevar a cabo experimentos con animales? ¿En qué medida el análisis de la ratio sufrimiento del animal-beneficio para humanos compensa o justifica ciertos experimentos?
Y es que, en efecto, detrás de los sentimientos o razonamientos inmediatos subyace un sinfín de interrogantes que merece la pena tener en consideración. Podemos afirmar que no es aceptable inducir sufrimiento a animales, que aspiramos a un desarrollo tecnológico y médico, que son necesarias unas garantías a los consumidores, que los estudiantes deben aprender… ¿pero es posible encajar todas estas piezas en un puzzle perfecto que nos satisfaga a todos?
Los experimentos con animales tienen su base en el hecho de considerar a otras especies animales como modelos en miniatura de los problemas humanos, sin los severos cuestionamientos éticos que conlleva experimentar con humanos. Esta idea básica, y comprensible desde el punto de vista metodológico y teórico (que no ético ni científico), es puesta en tela de juicio continuamente.
Por poner un ejemplo clásico e ilustrativo que puede servir como primera reflexión sobre esta cuestión, nos referiremos a un estudio que elaboró luna Comisión de la Comunidad Europea en el que tomaron parte 100 laboratorios para valorar la fiabilidad y validez del test DL 50 (se administra a una población de animales de laboratorio por vía oral, intravenosa, intravaginal, anal… etc una sustancia hasta que muere el 50% de los animales del estudio).
Se restringieron al máximo todos los factores susceptibles de incrementar la variabilidad en los resultados (a mayor variabilidad, menor valor de la prueba) y, a pesar de ello, al analizar los resultados se documentaron variabilidades que oscilaban del 144 al 738%.
Es obvio que la comunidad científica no se plantearía la experimentación con animales si no hubiera estudios como éste que hacen tambalear algunas de las ideas clásicas de la Ciencia, las cuáles se perpetúan, no por su valor científico, sino por la tradición, la inercia y el miedo al cambio, tan inherente al ser humano.
Se realizan experimentos con animales básicamente en varios campos: la docencia, la industria la investigación y en investigación militar.
Las prácticas docentes con animales tienen como objetivo el aprender ciertos procesos fisiológicos, características anatómicas o adquirir habilidades clínicas y quirúrgicas (entendiendo esto último, no como parte de un proceso tutelado, sino como un puro entrenamiento mecánico sin tratarse de un caso clínico). El hecho de utilizar animales (en general ratas y ratones, vertebrados con un sistema nervioso que les permite sentir dolor como mecanismo fisiológico de defensa) para experimentos reiterativos e innecesarios, ya que se pretende demostrar un concepto de sobras conocido, supone un sufrimiento gratuito (para animales y alumnos).
Muchas organizaciones como Physicians Comittee for a Responsible Medicine, EuroNICHE, the American Anti-vivisection Society, the National Anti-vivisection Society, the New England Anti-vivisection Society y muchas otras, desarrollan y ofrecen métodos pedagógicos que no suponen sufrimiento para los animales (tengamos en cuenta que, por ejemplo, las facultades de Medicina de Stanford, Harvard, NY, Ohio,etc…. no utilizan animales para prácticas docentes, y en Israel se ha prohibido recientemente realizar experimentos con animales en el ámbito educativo). ADDA presentó un Proyecto de Ley de Objeción de Conciencia a las prácticas con animales con el fin de promover la implementación de los métodos docentes que no requieren animales, y proteger al mismo tiempo a la persona que rechaza estas prácticas y aboga por aprender de una manera más ética.
Experimentación Con Animales from almayarma@hotmail.com on Vimeo.Respecto a la industria cosmética, merece la pena destacar los avances que se han producido, a pesar de que aún existen laboratorios que testan sus productos en animales. El Real Decreto 93/35 aprobado por el Consejo de Ministros del Gobierno español estipula que estará prohibido vender productos cosméticos que hayan sido testados en animales. Este Real Decreto está basado en una Directiva de la UE que entró en vigor el año pasado en el Reino Unido, sentando un importante precedente. Actualmente, hay un número ingente de laboratorios cosméticos que no realizan experimentos con animales, y es posible disponer de una lista pormenorizada de éstos poniéndose en contacto con AnimaNaturalis.
La ECEAE (European Coalition to End Animal Experiments) ha trabajado en un proyecto para unificar los criterios del etiquetado de «no testado en animales» y evitar la confusión al consumidor. Los laboratorios que se adhieren al proyecto se comprometen a que sus productos finales y las materias primas utilizadas no hayan sido testados a partir de una determinada fecha. Estos laboratorios se reconocerán por un logo exclusivo.
En la investigación es quizá el campo donde la tradición de experimentar con animales está más arraigada. Con el pretexto de comprobar una hipótesis, por inútil, absurda o excéntrica que fuera, se justificaba cualquier atrocidad (contemporáneos de investigadores como Claude Bérnard reconocen la extrema crueldad con que eran tratados los perros y se manifiestan totalmente contrariosa ello).
Actualmente, gracias a la presión de colectivos de defensa de los animales, de científicos, políticos, estudiantes, opinión pública, etc., se están realizando tímidos avances. Conviene destacar el hecho de que existen en todo el mundo centros de investigación y desarrollo de métodos alternativos al uso de animales como el GTEMA (Grupo de Trabajo Especializado en Metodologías Alternativas, dirigido por el Dr. Repetto), el ubicado en la Universidad Johns Hopkins (The Johns Hopkins Center for the Validation of Alternative Methods), el ECVAM (European Center for the Validation of Alternative Methods), FRAME, etc.Cada año, millones de animales son sometidos, en vivo, a innumerables pruebas y experimentos muy dolorosos para determinar la seguridad de productos cosméticos, de aseo personal y limpieza. Espumas de afeitar, champús y dentríficos son introducidos a presión en el estómago de los animales; inhalan lacas para el cabello; sustancias volátiles son rociadas sobre piel y ojos (test ‘Draize’). Otras pruebas, como la de la dosis letal (DL50), causan terribles sufrimientos. En ocasiones, estos experimentos se ocultan tras leyendas como: «clínicamente testado» o «testado bajo control dermatológico».
Grandes corporaciones como Unilever, Procter & Gamble, Colgate-Palmolive, Reckitt Benckiser y Johnson&Johnson están entre las principales empresas que experimentan en animales. Todos ellas realizan o encargan test en animales en algún punto de la producción.
Ejemplos de «experimentos» para garantizar la seguridad del consumidor:
- Espuma de Afeitar: Se mete a presión en el estómago de animales.
- Laca para Cabello: Se hace inhalar la sustancia hasta lograr un coma.
- Champú: Se obliga a animales a ingerirlo y se le introduce concentrados a los ojos de conejos.
- Dentrífico: Se fuerza a conejos, ratas y cobayas a ingerirlo.
- Máscaras y Sombra de Ojos: Se introduce en los ojos de conejos hasta la ceguera total.
- Maquillaje: Se extiende sobre la piel afeitada de animales sensibles.
- Solución para Lentes de Contacto: Se introduce en los ojos de conejos, más sensibles que los ojos humanos.
- Jabón: Se fuerza la irritación de la piel de animales afeitados.
- Bronceadores: Se expone a conejos con la piel afeitada a rayos ultravioleta para probar estos productos.
Un memorandum interno enviado a la Unión Británica contra la Abolición de la Vivisección (publicado en el diario británico The Independent el 11 de abril del 2002) reveló que secretamente Procter & Gamble había presionado a la Comunidad Europea para que apoyara las pruebas en animales para artículos de belleza y de tocador.El memorandum explicaba que el interés de Procter & Gamble en experimentar con animales debía mantenerse en secreto, y que «era importante que Procter & Gamble quedara fuera de los medios de comunicación, pues podría dañar su imagen el ser vista como una compañía que experimenta en animales.» La idea de Procter & Gamble era realizar estos experimentos fuera del Reino Unido.Algunos productos de Procter & Gamble son:
Productos alimenticios: patatas Pringles
Artículos del hogar: Desodorantes y perfumes: Giorgio, Hugo Boss, Old Spice
Pañales y Productos para el bebé: Pampers
Animales: Eukanuba, Iams
Cuidados del Cabello: Head & Shoulders, Pantene
Higiene sanitaria: Siempre, Always, Tampax
Limpieza: Ariel, Ace, Rindex, Cierto, Magistral, Ayudin, Cristal
Medicinas: Metamucil, Vicks
Cuidado de los dientes: Cloraseptic
Productos de Belleza: Dove, Max Factor-
2.-Nestlé S.A
Empresa alimentaria y de balanceados. Es la mayor empresa productora de alimentos en el mundo, con 479 fabricas en 81 países, y más de 150 marcas. Prueba balanceados en animales; ha sido criticado por temas de transgénicos, explotación infantil, productos adulterados, contaminación, ética…
Una de sus compañía, Purina Petcare (antes Ralston Purina) que aparece en los listados de empresas que experimentan en animales, adquirida por Nestlé, lleva experimentando desde el año 1926, en un complejo llamado Purina Pet Care Center. Entre los experimentos que realizan, se destacan estudios en los que inducen a fallos renales a perros y otros animales para después intentar curarles con una dieta baja en proteínas.
Los tests con animales para «crear o investigar nuevos balanceados» son totalmente inútiles, carentes de rigor científico, crueles y macabros, y mucho menos ahora, que disponemos de métodos como el «Techno-Tu», que reproduce todas las reacciones que tendría el alimento o sustancia en el aparato digestivo del animal.
Algunos productos de Nestlé son:
Alimentos: Nido, Molico, La Lechera, Suflair, Maggi, Mendicrim, Shimy, Nido Crecimiento
Bebidas: Nescao, Nesquik, Nestle Xocolat
Cafes: Amanecer, Nescafé
Helados y dulces: Noel, Frigor, Dolca
Aguas minerales: Nestle, S. Pellegrino, Perrier, Eco de los Andes, Glaciar, Villa de los Arrollos, Fresh Water
Alimentos para mascotas: Friskies, Dog Chow, ProPlan, Purina One, Excellent, Dogui y Gati
3.-Colgate-Palmolive
Empresa química, cosmética, de productos domésticos y de balanceados. Prueba productos químicos y balanceados con animales en el Hill’s Pet Nutrition Center, Topeka (EEUU). Hace unos años, la Unión Británica contra la Abolición de la Vivisección dio a conocer detalles de un experimento llevado a cabo por la compañía en la Universidad de Columbia en el que se encerraban conejillos de indias en pequeños tubos de plásticos y se les aplicaba una solución fuerte de sulfuro durante cuatro horas al día durante tres días, causando que la piel de los animales se quebrase y sangrase.
Algunos productos de Colgate-Palmolive son:
Pasta de dientes: Colgate, Kolynos, Odol
Champús y acondicionadores, jabones: Palmolive, Polyana
Limpiadores: Odex
Alimentos para mascotas: Hill’s Pet Nutrition -
4.-Mars
Empresa alimentaria y de alimentos para animales. Prueba balanceados de animales en mascotas en el Waltham Centre for Pet Nutrition, propiedad de Mars, fabricante de las comidas para mascotas Pedigree y Whiskas.
5.-Unilever
Multinacional anglo-holandesa con más de 1600 marcas en los mercados de 150 paises. También experimenta sus productos en animales. Los productos probados incluyen cosméticos, productos de tocador, limpiahogares, comida, aditivos alimentarios y químicos.
Algunos productos de Unilever son:
Mayonesas, salsa golf, ketchup, mostaza: Hellmann’s, Fanacoa, Savora
Leches de soja: Ades
Caldos y sopas varias: Knorr, Arisco
Almidón de maíz: Maizena
Aceites de maíz, girasol, aceite en spray: Mazola
Té, té con sabores: Té Lipton
Helados: Kivon
Salsas de tomate: Cisco
- Artículos del hogar:
Desodorantes, champús, jabones: Rexona, Sedal, Dove, Organics, Lux, Suave
Pasta de dientes: Close up
Fijadores de pelo: Lord Cheseline
Pañales: Huggies
Toallas femeninas: Day’s, Kleenex
Papel higiénico: Kleenex, Scott
Desodorantes: Impulse, Patrichs
Cremas y emulsiones: Pond’s
Limpieza: Drive, Granby, Skip Comfort, Vivere, Ala, Cif6.-Johnson and Johnson
Empresa química y productos para el hogar.
Artículos del hogar:
Limpiadores de piso: Brillo, Blem, Brishine, Ceramicol, Echo, Glade, Clo Cot, Klaro, Klear, Lysoform, Mr. Músculo, Pass, Shout, Ziploc
Matamosquitos: Fuyi, Off, Raid7.-Reckitt & Benckiser:
Empresa química, cosmética y productos para el hogar.
Artículos del hogar:
Champú: Harpic
Limpieza: Woolite
Cera: Polycera
Nos encontramos, por tanto, en un punto de inflexión. La Ciencia y la Sociedad está avanzando respecto a hace unos años, pero aún quedan muchas lagunas por cubrir y muchos obstáculos por superar. Por ello, es importante que no cesen los esfuerzos por parte de los colectivos que apoyan los métodos alternativos para que se siga invirtiendo en su desarrollo e implementación en todos los ámbitos, ya que de este modo todos nos beneficiaremos: los humanos porque desarrollaremos modelos más fiables (se está investigando, por poner un ejemplo, sobre la metabolización de fármacos en cultivos de hígado humano y se están obteniendo resultados más fiables que en otras especies, cosa, por otra parte, lógica y esperable) y los animales no humanos, porque evitaremos su sufrimiento innecesario…
Pero hasta que la sociedad logre este loable fin… ¿Cuántos errores vamos a cometer en la prescripción de fármacos a humanos? ¿Cuántos animales deberán sufrir en silencio en los laboratorios?
De nosotros depende.






Libro semanal


E hizo Dios los animales de la tierra según su especie, y ganado según su especie, y todo animal que se arrastra sobre la tierra según su especie. Y vio Dios que era bueno. Génesis 1:24-25





¿Humanidad?

Existen mùltiples problemas que angustian y oprimen a la humanidad,(a unos mucho mas que a otros), que los atentados de falsa bandera han contribuido a poner en evidencia, pero lo mas deprimente y terrible consiste en que ninguno de ellos, terrorismo incluido, son inevitables, pues el hombre posee medios sobrados para solucionarlos y prevenirlos, simplemente carece de autèntica voluntad o intereses para conseguirlo. La mayorìa de los mismos son fruto de la insolidaridad, el egoismo y la irracionalidad. El del incremento de la longevidad no es tal, pues el maquinismo y la tècnica rinden sobradamente para compensar la disminución del porcentaje de la poblaciòn productiva y la mejor prueba de ello es el continuo incremento del paro en la mayorìa de los paises, llegando en los subdesarrollados a el 50% sobre todo en la juventud, principal motivación ,junto con la deficiente o inexistente educación, para caer en las garras del integrismo cristiano o musulman. El de la excesiva natalidad y el mantenimiento de la gravedad y extensiòn de las enfermedades infecciosas , es debido igualmente a la Religión y a la insolidaridad de los paises desarrollados, que no tienen verdadera voluntad de extender la cultura y desechar los obsoletos resortes de poder aportando los medios necesarios para solucionarlos.
Algo parecido se puede decir del problema de los alimentos a nivel
global, pues con un moderado control de la natalidad en los paises
subdesarrollados (en los desarrollados ya se ha conseguido y en algunos
sobradamente), que se lograrìa fácilmente con un aumento del nivel
cultural y de vida en los mismos, aquel tampoco existirìa ,ya que las
hambrunas existentes en unos paises se conjugan con el despilfarro y
los enormes excedentes alimentarios de otros, en los que se penaliza
la producciòn o se destruyen en lugar de enviarlos a donde se necesitan
desesperadamente, pero sí se proporcionan a esos paises armas modernas
para que se maten con mayor efectividad y paralelamente para poder
controlar a su antojo sus riquezas naturales ,que expolian ademàs con
total cinismo e impunidad como pago de una deuda inacabable que los
mantiene en perpètua pobreza, producida por importaciones de artìculos
manufacturados carísimos, (armas incluidas) en la mayorìa de las
ocasiones fruto de esplèndidas comisiones a gobernantes corruptos,
combinados con precios de saldo para las riquezas naturales y materias
primas que exportan.
Dicha voluntad deberìa surgir de los principios èticos o valores
solidarios y humanìsticos , pero todos ellos representan un sentido
superior que tendrìa que dominar a nuestros instintos agresivos y
egoistas . Por desgracia lo antes expuesto demuestra claramente que
en general no ocurre asì y nos debemos preguntar el por què. Yo creo
que la respuesta es evidente, sin una base sòlida y profunda que los
fundamente se transforman en palabras huecas que no se sienten y asì
podemos observar que en la mayorìa de los paises alternan diversos
partidos con distintas siglas y programas , pero los resultados de su
quehacer polìtico son similarmente deprimentes porque sus miembros no
tienen interiormente autèntica voluntad de solucionar los antedichos problemas.
Y es que realmente es imposible el fundamentar valores de un sentido
superior en un mundo en el que la Religión ha fracasado y la ciencia
pregona que no existe sentido alguno. Si realmente nuestra existencia
es un absurdo que surge de la nada para volver a ella en un entorno en
el que sòlo impera el ciego concurso del azar y las fuerzas fìsicas,
la reacciòn lògica de la voluntad no es impulsar los valores èticos,
sino el vivir un hedonismo del presente, (el aquí y ahora), y la ley
del mas fuerte y el todo vale que se van imponiendo por doquier. De ahì
que la tònica general sea el combatir el extremado reduccionismo expuesto,
intentando paralelamente aportar dicha base mediante la propuesta de el
Todo que la mayorìa conoceis. La solidaridad y la comprensión debe ser
ahora y siempre el motivo principal del género humano.

Hacer beneficios a un ingrato es lo mismo que perfumar a un muerto. (Plutarco)


La muñeca

con los pies casi desnudos, con las manecitas yertas,
cubriendo, a modo de manto con su falda la cabeza
y sin temor a la lluvia que cada vez más arrecia,
contempla extasiada y triste el interior de una tienda
Que por su gusto en juguetes es de todas la primera.
con voz desabrida y seca,
Un dependiente empujando a la niña hacia la acera.

-¡Déjeme usted!, ¡Si es que estaba mirando aquella muñeca!
-¡Vaya, retírate pronto, y deja libre la puerta!
-Dígame usted, ¿Cuesta mucho?
-¿Quieres marcharte, chicuela?
-¡Lo que es como yo pudiera!…
-¿Pues no quiere comprar ella?…
-Lárgate a pedir limosna y déjate de simplezas.
-La muñeca que te gusta vale un duro, conque ¡Fuera!..

En vano pide limosna…
Ninguno escucha sus quejas…
y desfallecida y débil cruza calles y plazuelas,
recordando en su amargura la tentadora muñeca.

-Déjame que voy deprisa.
un centimito, tengo hambre!…
-(Pobre niña, me dá pena)…Toma.
-¡Señor, si es un duro!
tener buena cama y cena.
-¡Déjeme usted que le bese, la mano…
-Quita, tontuela.
-¡Un duro, estoy mas contenta!…
¿No será falso, verdad?
-¡Cómo, muchacha!, ¿Tu piensas?…
la sorpresa…

¡Si voy a volverme loca
de alegría!…. ¿quién dijera?…
¡Que Dios le premie en el mundo,
y le dé la gloria eterna!
corrió por la calle abajo veloz como una saeta.

A la mañana siguiente se comentaba en la prensa
el hecho de haber hallado, en el quicio de una puerta,
¡el cadáver de una niña abrazando una muñeca!.
Vital Aza

Antonio Martinez Ares
«lo que hiciereis con uno de estos pequeños, a mi me lo hacéis» (Mateo. 25, 40)


NO A LA LEY MORDAZA
La compañía de teatro ‘Las Niñas de Cádiz’ han sido elegidas como pregoneras del Carnaval de Cádiz 2018. Las hermanas López Segovia: Ana, Alejandra y Rocío junto a Teresa Quintero han aceptado la propuesta del Alcalde de Cádiz: José María Santos, para dar el Pregón del Carnaval de Cádiz 2018, que se celebrará en la plaza de San Antonio el próximo 10 de febrero.
Un mundo infeliz


Aldous Huxley

No sé lo que opinaría de nosotros, la humanidad, si alguien pudiera observarnos desde el espacio exterior, y no me refiero a ninguna clase de ente divino, sino a un tipo de inteligencia extraterrestre. El estudio del ser humano como especie no dejaría de causarle asombro, risa y pena y un poco de repugnancia también. Al no tener implicaciones humanas, podría ser objetivamente crítico e imparcial, algo que una persona, por muy ecuánime que pretenda ser, es imposible que lo consiga.

Bien, dicho esto, pasemos a las conclusiones que supuestamente podría obtener en su análisis del peculiar bípedo que habita como especie predominante en ese remoto e insignificante punto azul pálido que es el planeta Tierra.

Para empezar, observaría que físicamente el ser humano no es gran cosa. La mayor parte de los animales nos supera por mucho en algún aspecto corporal: son más fuertes, más rápidos, más resistentes y más naturales que cualquiera de nosotros. Sólo hay algo en lo que somos manifiestamente superiores: la inteligencia, la capacidad de razonar y comprendernos a nosotros mismos como individuos e indagar asimismo en el universo que nos rodea. Pero esta innata cualidad humana, en lugar de hacernos mejores y más nobles, nos ha hecho crueles y engreídos al otorgarnos un poder superior sobre los demás seres vivos.

En cuanto a la organización social de los humanos, no dejaría de pasarle por alto la mediocridad, cuando no la simple estupidez, bajeza moral y rapacidad de que hacen gala la mayoría de los dirigentes políticos de cualquier escala y nación. Me da igual, desde alcaldes de pueblo a jefes de Estado, si echas un vistazo general, la verdad es que el panorama resulta completamente desolador. Es difícil encontrar un líder de cierta talla, y cuando lo encontramos, por norma general solemos acabar matándolo. Entiéndase que me refiero a esa clase de personas singulares que, a modo de referentes éticos en el devenir histórico de la humanidad, nos aportaron valor, conocimiento y esperanza: Espartaco, Zapata, Gandhi, Durruti, Malcolm X, entre otros muchos, fueron algunos de esos héroes populares que se enfrentaron al poder y sacrificaron su vida por el bien común. Su ejemplo traspasa las fronteras e influye en millones de personas en todo el mundo. Me temo que apenas quedan líderes así hoy día, si es que existe alguno. Al igual que el lince ibérico, son raros de ver, no pueden vivir libremente y corren peligro de extinción.

No soy partidario de la figura de un jefe como guía de masas, ni me gusta la figura tergiversada mesías redentor, aunque comprendo que algunos individuos, por su altura ética e intelectual, pueden servir de referencia e inspiración para mucha gente. De todas formas, creo que es mejor que cada uno piense y actúe por sí mismo. Que cada persona sea su propio líder natural. Pero ya sabemos que asumir esta responsabilidad es difícil, arduo y peligroso. Uno tiene que aprender a pensar por sí mismo y, peor todavía, debe hacerse responsable de sus propias decisiones. La sociedad no promueve la libertad individual. Por el contrario, prefiere un rebaño humano guiado por un pastor. No obstante, la fórmula se ha comprobado que únicamente beneficia a una minoría, la que ostenta el mando, en perjuicios de la inmensa mayoría, que apenas cuenta para nada y debe conformarse con obedecer dócilmente las órdenes del amo.

Es fácil comprobar la veracidad de mis palabras. Basta con leer un poco de historia o con echar un vistazo a la situación actual del mundo.

Miras a un lado y ves a Putin, un tipo de cuidado, con una mirada fría, siniestra y amenazante, forjado como agente soviético de la temible KGB; es abogado y político profesional, una mezcla de fatales consecuencias. Pobres rusos, si no habían padecido ya suficiente con los zares y los comunistas, ahora les toca experimentar en su carnes el capitalismo salvaje al estilo neoliberal. En muchos sentidos Rusia me recuerda a España, ambos son países sin suerte, con una historia atroz de gobernantes déspotas, corruptos e inútiles, sin la menor preocupación por el pueblo, al que tratan como si fuera escoria.

Para echarse a temblar son también los mandatarios de China y su aterrador ejército de generales bajitos con gorra de plato y el pecho cuajado de medallas, que han convertido a toda la nación en una gran fábrica que abastece de productos al mundo entero. Una cultura milenaria de miseria y opresión para el sufrido pueblo chino. Otro ejemplo especialmente aborrecible de jerarca tiránico es el hijo y heredero del anterior dictador norcoreano, ese cabeza de patata con un aspecto perversamente aniñado. O los brutales militares sudamericanos machacando a sus desgraciados pueblos golpe tras golpe, sin permitirles levantar la cabeza, siempre al servicio de una oligarquía opresora. África está sumida en un perpetuo horror de esclavitud, sangre y cadáveres masacrados desde hace siglos. Sin olvidar a la civilizada y culta Europa, que ha padecido dos guerras mundiales consecutivas y ha sido escenario de las peores atrocidades cometidas contra el ser humano. La verdad es que no sé hacia dónde dirigir la mirada; en todas partes es lo mismo: políticos que más que dar confianza dan miedo.

O bien podemos fijarnos en los fundamentalistas religiosos, ya sean de un credo u otro, judíos o musulmanes, católicos o protestantes, pues a pesar de que todos declaran que son religiones de amor, a la hora de la verdad no tienen escrúpulo alguno en asesinar piadosamente al prójimo cuando piensa diferente. No me explico cómo pueden contar con millones de fieles que obedecen como borregos a sus profetas y patriarcas. La falsedad resulta tan evidente, que no entiendo cómo alguien se puede tragar tal cúmulo de patrañas y engaños, sin más base que unos supuestos mensajes divinos que solamente unos pocos elegidos pueden interpretar para el resto de creyentes. La fe necesaria para creer nos exige dejar en suspenso la razón, o dicho de otra manera, las creencias religiosas requieren prescindir de nuestro rasgo más señalado: la inteligencia humana. La mente, ese gran misterio aún por desvelar, es la clave de la supervivencia, al permitirnos aceptar lo bueno y útil como verdadero y desechar lo malo y pernicioso como falso. Y las religiones, a mi entender, se encuentran dentro de este último apartado.

Ya sé que es simplificar demasiado un asunto complejo que ha preocupado al conjunto de los mortales desde sus albores; es más, el sentido trascendente de la existencia constituye uno de los rasgos que definen su humanidad. Pero es lo que pienso de esta superchería extendida por el mundo entero como una plaga.

No puedo concebir un Dios que consienta el sufrimiento del mundo. Un mundo en el que resulta muy duro vivir, sobre todo por el daño deliberado que el propio ser humano, en su estupidez y maldad, inflige a todo cuanto existe, empezando por sí mismo.?. Sinceramente, creo que nos iría mejor si nos deshiciéramos de tales mentiras y asumiéramos la verdad de la vida, aquí y ahora, y sustituyéramos las arcaicas, caducas e ilusorias creencias religiosas por una moral enteramente humana, basada en la dignidad y la libertad del individuo, un código ético de conducta que respetara los derechos individuales de cada persona y nos sirviera para vivir mejor unos con otros.

En este recorrido por la actualidad planetaria, tampoco podemos olvidarnos de la reciente estrella del firmamento político, el famoso y televisivo Donald Trump, el nuevo presidente norteamericano, en este caso empresario y político, dos términos que unidos deberían ser considerados opuestos, contradictorios y hasta ilegales. ¿Qué decir que no se haya dicho ya de semejante individuo?

No tengo la menor duda de que nuestro visitante estelar pegaría un salto en el espacio al comprobar quién dirige actualmente la Casa Blanca, uno de los mayores y más terroríficos centros de poder que existen en la Tierra. Y desde luego, cuando escuche hablar a Trump, con su estúpida, insufrible y malvada verborrea, pensará que la humanidad ha enloquecido al permitir que alguien como él ocupe un cargo de tanta responsabilidad. Es una vergüenza para el género humano que un personaje de su calaña pueda detentar algún tipo de poder sobre la gente.

Si ha comenzado su controvertido mandato entre manifestaciones masivas y fuertes críticas populares, no sabemos qué sorpresas puede depararnos en el futuro, pero sospecho que ninguna buena. Un chiflado megalómano, paranoide y psicópata de sus dimensiones puede llevarnos a la catástrofe.

Espero equivocarme por la cuenta que nos trae a todos, pero no me extrañaría nada que, tarde o temprano, acabe provocando una guerra sobre algún pobre país indefenso -si llega el caso, confiemos que sea a pequeña escala- como medio de subir en las encuestas de popularidad americanas. Es un viejo truco que se ha empleado con éxito garantizado en el pasado. Ya lo utilizaron algunos de los más nefastos presidentes estadounidenses -Reagan con la invasión de Granada y los bombardeos a Libia, Bush padre e hijo en las guerras de Iraq y Afganistán y Obama, sanguinario destructor de Libia y el Yemen, por ejemplo- aunque prácticamente la totalidad de gobernantes americanos ha recurrido, en un momento de crisis, a esta vieja estrategia populista. Qué importa un poco de sangre derramada si es por el bien de “América”. Lo importante es que las banderas ondeen al son del himno nacional. El fin está claro: conseguir que la población se olvide de sus problemas cotidianos y entregue sus libertades civiles rendidamente y sin cuestionar en manos de una autoridad salvadora. ¿Una exageración? ¿Un absurdo? Nada deseo más que equivocarme en mis funestas predicciones. Pero ahí está la historia para demostrar que es posible, demasiado posible.

Las personas somos fácilmente manejables y la clase dirigente tiene experiencia en manipular a la opinión pública a su antojo. El gobierno americano lo ha hecho en repetidas ocasiones. Lo hizo en la Primera Guerra Mundial, cuando EE UU era un país neutral y gracias al empeño del presidente estadounidense de entonces, Woodrow Wilson, otro abogado y político profesional, entraron a formar parte de la contienda. El hundimiento del transatlántico británico RMS Lusitania como elemento desencadenante de la entrada en el conflicto no fue más que un mero pretexto, ya que fue hundido en 1915 y Estados Unidos declaró la guerra a Alemania dos años más tarde. Yo me inclino a pensar que, como en la mayor parte de las guerras, fueron razones económicas y políticas principalmente las que llevaron a tomar tal decisión.

La Segunda Guerra Mundial fue ganada por los aliados, gracias sobre todo a los valientes americanos que vinieron a sacar las castañas del fuego a los pobres e indefensos europeos. Es cierto, el inmenso poderío militar norteamericano se empleó en hundir a la malvadas hordas nazis (que lo eran, indudablemente) liberando así al mundo entero para la democracia capitalista, como bien nos ha contado el cine en innumerables ocasiones. Sin embargo, esta historia mil veces repetida olvida un hecho fundamental: el sacrificio heroico de los soviéticos, pues no en vano murieron millones de ellos durante aquel terrible periodo.

Bien, no quiero ponerme catastrofista, pero la realidad es innegable. Podría continuar con un ejemplo tras otro: Corea, Vietnam, Cuba, Chile, Nicaragua, Granada (el país, no la provincia española, mediante la operación militar Furia Urgente), Libia, Iraq, Afganistán… ¿Adónde quiero ir a parar con este cúmulo de datos históricos? Sencillo, a que nos manipulan como quieren y nos usan como si fuéramos carne de cañón. Y lo peor de todo es que cuentan muchas veces con el propio respaldo de las ovejas que llevan al matadero.

En las contadas ocasiones en que la gente trabajadora ha tratado de sacudirse el yugo de sus amos y verdugos -la rebelión de los esclavos en la antigua Roma, la Comuna francesa o la revoluciones mexicana, rusa y española del 36, por citar unas pocas muestras- el fracaso ha sido completo. A lo largo de la historia, los rebeldes fueron sistemáticamente sometidos y aplastados. Pero lo que no pudieron, ni podrán jamás, es acabar con la esperanza de un mundo mejor. La idea permanece invencible: una ilusión que sirve para guiar a la humanidad doliente. Y esta utopía de justicia social es la que, a través de todo tiempo y lugar, ha encarnado el ideal anarquista. Pues allá donde se libre una lucha por la libertad y la dignidad del ser humano, para mí representa lo que entiendo por anarquismo.

De todas maneras, más preocupante que la maldad de los perversos, es la pasiva indiferencia de la gran mayoría silenciosa. Pienso si acaso tenemos los políticos que nos merecemos. Al fin y al cabo, no dejan de ser el reflejo de la sociedad cruel, injusta, desigual y enferma que hemos creado entre todos.

Otro importante tema a debatir es averiguar quién manda realmente en el mundo. Sabemos que los gobiernos tienen una esfera de influencia y poder bastante limitada, condicionados y sujetos como están por otros factores determinantes para la marcha de un país, como son primordialmente las grandes empresas multinacionales, los grupos de presión mediática y la banca, a los que hay que sumar los partidos políticos, sindicatos y religiones principales, cuyas cúpulas dirigentes influyen en mayor o menor medida en las decisiones políticas, sociales y económicas que afectan a toda la nación. La población común, es decir, la inmensa mayoría de nosotros, apenas tenemos nada que decir en este asunto. Se nos consulta en las elecciones para guardar las apariencias democráticas y basta. Luego, el político de turno tiene las manos libres para hacer y deshacer a su gusto, sin responsabilidad personal, sin rendir cuentas a nadie, sin respetar sus compromisos electorales. Y únicamente cuando nos empujan al límite, se encontrarán con la decidida y firme oposición de los ciudadanos. A nosotros nos reservan otra importante función: contribuir con los impuestos al sostenimiento del gasto general y soportar las decisiones de unos dirigentes que suelen gobernar en defensa de sus propios intereses de clase.

Las grandes empresas multinacionales ostentan uno de los sistemas de poder más importantes a escala mundial, por su volumen de actividad, por su capacidad de incidir sobre las economías nacionales, por su extensión global, por los millones de trabajadores que emplean y por la concentración en unas pocas manos de su capacidad directiva. Se trata de uno de los ámbitos de intervención más potentes que podemos encontrar en este momento.

Los inmensos recursos económicos que manejan sitúan a las grandes multinacionales por encima del PIB de muchos países. Por citar un dato revelador, dos de las mayores empresas españolas por ingresos son el Banco Santander y Repsol, aun estando situadas lejos de los puestos de relevancia entre las más ricas del mundo. Sin embargo, los beneficios anuales del Banco Santander superan con creces el presupuesto de naciones como Angola o Libia.

Las compañías multinacionales son explotadoras y agresivas con los países en los que operan. Los salarios de los trabajadores se reducen y sus derechos laborales son suprimidos, lo que hace que los costes de los productos sean menores. Su objetivo primordial es generar el máximo de beneficios, o lo que es lo mismo, enriquecer a un reducido grupo de personas a costa de la explotación de los trabajadores y de los recursos naturales, sin reparar en los medios utilizados, ya que el fin básico -ganar dinero- se impone por encima de cualquier otra consideración.

Además, destruyen el mercado nacional y local con su política de precios, imposible de mantener por los pequeños y medianos empresarios. Las grandes corporaciones utilizan su inmenso poder para adueñarse de los mercados, hasta que sus competidores son literalmente eliminados. Esta explotación desmedida y sin control está suponiendo un alto coste ecológico para el planeta. La destrucción de ecosistemas completos por parte de grandes industrias químicas, mineras y petroleras, se lleva a cabo con total impunidad, como pudimos comprobar en el vertido de petróleo en las costas gallegas, o peor todavía, con los miles de muertos y heridos ocasionados por el desastre de Bhopal en la India.

En esta alianza entre el gobierno, la banca y las grandes empresas, se fraguan medidas políticas y económicas favorables a sus intereses particulares en forma de ayudas millonarias, exenciones de impuestos y amnistías fiscales, regulaciones laborales y demás leyes y normativas encaminadas a incrementar su poder y riqueza. Estos poderes conchabados se dedican a explotar, exprimir y ordeñar hasta la última gota al contribuyente, a toda la masa de gente trabajadora y honesta que ha de ganarse la vida duramente con su esfuerzo diario. Somos nosotros y no ellos con sus cuentas millonarias y sus lujosas mansiones, los que hemos de afrontar la dureza de una existencia condicionada por una mala organización social y una pésima gestión de los recursos colectivos. Y el ingente tesoro nacional, toda la riqueza producida por los trabajadores, va a parar en gran medida al bolsillo de unos cuantos desaprensivos. Estamos hartos de las noticias que desvelan el gran negocio a escala mundial que se traen entre manos políticos, banqueros y empresarios, a costa como siempre de los mismos: tú y yo y todos nosotros, la gente que realmente mueve el mundo con su trabajo cotidiano.

Diversos colectivos populares, sindicatos, partidos, ONG y otras asociaciones, llevan a cabo campañas contra los abusos de las corporaciones industriales, pero el poder de estos gigantes es inmenso y poco pueden hacer. Para evitar la ruina y el caos hacia el que nos conducen inexorablemente, no basta con la débil oposición de estas organizaciones. Hay que luchar. Pero es una lucha que requiere de la unión y la participación de todos nosotros.

Y los sindicatos, ¿qué tienen que decir a todo esto? La verdad es que bien poca cosa. Acuden a las mesas de negociación como víctimas propiciatorias. La patronal se ha pasado por la piedra a los sindicatos y éstos permanecen mudos y ajenos ante el atropello al que son sometidos los trabajadores.

Sin embargo, no olvidemos jamás que el sindicato es la única defensa real y efectiva con que cuenta la clase trabajadora. Gracias a la lucha obrera se consiguieron la mayoría de las mejoras laborales: seguro médico, jornada de ocho horas, vacaciones, subidas salariales, convenios colectivos… Sin la ayuda y la fuerza que le ofrece la unión sindical, los trabajadores se verían totalmente perdidos. Retornaríamos a situaciones de vasallaje propias de un lejano pasado. Es fundamental volver a reflotar las asociaciones sindicales y crear organizaciones independientes, fuertes y unidas. Para nosotros, los trabajadores, es un empeño vital.

Bien, centremos ahora la atención en los españoles. Dirijamos la lente del telescopio espacial, no hacia las estrellas, sino hacia un pequeño país situado en el borde occidental de Europa, una península que compartimos con Portugal. España, mal que nos pese, es un país de segundo orden. Nuestras viejas glorias forman parte de un pasado remoto. La verdad es que no pintamos gran cosa en el orden mundial. Nuestro papel ha quedado reducido al de meros comparsas de las grandes potencias.

Y lo que podemos aquí observar tampoco resulta demasiado tranquilizador. La tan alabada democracia española, el menos malo de los sistemas políticos, según ha sido definido, mantiene las viejas estructuras de poder de la época franquista. Aplicando la vieja máxima de Lampedusa, cambiaron las cosas para que todo siguiera igual. Podemos comprobarlo fácilmente echando un vistazo a nuestros actuales políticos, banqueros y empresarios, muchos de ellos con raíces que llegan hasta la dictadura. Un apunte ¿Os habéis fijado bien en la cara que tienen la mayoría de nuestros dirigentes, en sus rostros faltos de humanidad? La verdad es que me estremezco sólo de pensarlo. Dan temor, desconfianza y asco.

La complicidad entre la política y los grandes poderes financieros posibilita que los ricos amasen ingentes fortunas, más allá de todo límite razonable. Como contrapartida, los gigantes industriales tienen en su cuenta a ex presidentes, ministros, políticos, jueces e intelectuales de diversa ralea. Además, mediante el control de los medios de comunicación se aseguran una cobertura positiva, de tal manera que es posible ver anuncios como el de Repsol, que más que una petrolera, cuyos beneficios pasan por diezmar la tierra sin miramientos como hace en realidad, parece un grupo ecologista dedicado al sostenimiento del planeta.

El grado de corrupción que impera en nuestro país en estos tiempos ha alcanzado cotas realmente alarmantes. La impunidad y la indecencia campan a sus anchas. Salvando las distancias, la situación actual guarda muchos paralelismos con la etapa gansteril americana de los años veinte. Podemos encontrar políticos corruptos y policías y jueces venales al servicio de una élite empresarial, que tal vez no deje muertos tirados en las calles, pero que tiene un poder letal mucho mayor que el de las bandas mafiosas durante “la prohibición”. Hay muchas formas de matar a una persona y no todas son claramente violentas. Pero violencia es dejar a familias sin cobijo, a trabajadores sin empleo, a enfermos sin atención sanitaria, a niños y ancianos sin los cuidados que necesitan. Es un tipo de violencia soterrada, que mata callando.

Cuando una persona pierde su trabajo, pierde estabilidad, se ve acuciado por deudas y por problemas de diversa índole, aunque su origen sea el mismo, en una serie implacable de dificultades a las que resulta imposible hacer frente: el cuidado y la manutención de los hijos, la hipoteca de la casa, la luz y la calefacción, el gasto del coche… Cuando un trabajador se queda sin empleo puede perder su hogar y, con el tiempo y la presión suficientes, puede incluso perder el norte y terminar haciendo algo irreparable. Está abocado a caer más fácilmente en la delincuencia. La pérdida del trabajo puede destrozar a una persona. Estar sin empleo mucho tiempo puede hundirte.

Lo sé por experiencia. He estado en paro varias veces, las suficientes para saber de qué va el asunto. En cierta ocasión, me largué de un empleo detestable que odiaba a muerte, poco después me echaron del piso por no poder pagar el alquiler y me vi en la calle. Acudí a pensiones y hostales, pero deseaba ahorrar hasta la última moneda y, además, esos lugares me resultaban fríos e inhumanos. Me deprimían. Así que durante una breve temporada, hasta que la suerte cambió, me estuve alojando en mi viejo Seat 1.200 Sport, estrecho y reducido espacio para alguien como yo, donde pasaba las noches en la apartada soledad de un parque público de las afueras de la ciudad.

Visto esto con la distancia suficiente, se me antojan locuras de juventud. Estaba solo por aquel entonces y nada me importaba demasiado. Sabía que tarde o temprano volvería a encontrar un trabajo, esperanza de la que muchos ahora carecen. Sin embargo, asomarme al abismo, me infundió miedo. Lo confieso sin ámbages. Me asustó pensar que podría verme sin techo y sin dinero para sobrevivir. Y no era una simple cuestión de merecimientos. Podía pasarle a cualquiera. Hasta a los mejor preparados. Bastaba un resbalón en forma de despido, enfermedad, accidente o cualquier otra contingencia inesperada, para rodar inevitablemente hacia el fondo de la fosa social.

Soy de esa clase trabajadora que necesita el sueldo diario para subsistir, es decir, para pagar y comer. Desde que comenzó la provocada crisis económica allá por el año 2008, hay más personas que piensan igual que yo. Todos hemos cobrado una mayor conciencia de la mala situación que vivimos. Todos somos más conscientes de que el rico es cada día más rico y el pobre cada día más pobre, y el que tiene un trabajo, aunque sea un empleo de mierda de los que tanto abundan actualmente, se puede considerar afortunado.

Recuerdo que antes podías ver en el telediario manifestaciones y huelgas, hoy los mineros, mañana los agricultores, pasado los obreros de los altos hornos o de los astilleros. Ahora no sé si hay sindicatos, pues nunca se les ve por ningún sitio. Bien es cierto que, con la escasa fuerza que tienen, poco pueden hacer. Los trabajadores están tan enfrentados, aislados y asustados que soportan abusos e injusticias sin rechistar, totalmente abatidos como clase social. Lo hemos perdido todo, no solamente las mejoras laborales tan duramente conquistadas en el pasado, a costa de enormes esfuerzos y sacrificios, peor es haber perdido el ánimo de lucha y, me atrevería a decir, que hasta nuestra propia dignidad como seres humanos. En fin, estamos derrotados. Hay que reconocerlo. Si al menos fuéramos capaces de protestar como último recurso, pero ni siquiera eso; nos sacrifican en completo silencio y apatía. Esto no sucede únicamente en nuestro país. Es un mal generalizado, pero oculto y callado y, no por eso, menos nocivo y letal para el conjunto de la sociedad.

En fin, creo que es suficiente. No quiero hablar de guerras y refugiados, de epidemias y hambrunas. No deseo comparar la opulencia y derroche de unos con la pobreza y la miseria de otros. No tengo valor para seguir hurgando en las viejas heridas de este sufrido mundo. Y, hastiado de tanto sufrimiento inútil y gratuito, cierro mis ojos, que no mi conciencia, ante los males ajenos. Como lenitivo, busco consuelo en la naturaleza, en el arte, en alguna gente, en todo lo bueno y hermoso que también alberga este pequeño rincón del universo.

La Tierra es nuestra casa, un hogar temporal que algún día lejano habremos de abandonar forzosamente. Nuestro futuro como especie depende de la capacidad que tengamos de alcanzar las estrellas. Mientras tanto, debemos cuidar nuestro lugar de origen, el sitio que nos ha visto nacer y nos define como humanos. Cada vez estoy más convencido de que la ciencia nos salvará si no nos extermina antes.

Desconozco lo que opinaría nuestro hipotético visitante cósmico, pero supongo que la conclusión más evidente a la que llegaría tras observar nuestro comportamiento es que somos una especie peligrosa para nosotros mismos y para los demás seres vivos, provengan éstos de nuestro entorno terrestre o del espacio exterior. En consecuencia, la Tierra debería mostrar un cartel con este mensaje: “¡Cuidado, personas sueltas!”, como señal de advertencia para el resto del universo.?No sé vosotros, pero creo que ya hace mucho tiempo que deberíamos haber tomado las calles. Y tras la calle, el gobierno de nuestros intereses humanos y como trabajadores. Decidir por nosotros mismos, en lugar de delegar en otro. Ser los verdaderos artífices de nuestra vida. Pero supongo que no lo verán mis ojos.

Al finalizar este somero análisis de la situación mundial y nacional, no puedo por menos que sentirme mal. Y no es para menos. Sólo puedo lanzar una llamada de socorro: ¡Que paren este mundo, quiero bajarme!

Me cuesta terminar el artículo con una visión tan amarga, pesimista y, tal vez, excesivamente desalentadora.

La gente debe organizarse en movimientos populares a través de los cuales consiga asumir el control real de su destino. La gente puede crear esa clase de poder colectivo que es preciso para cambiar sus vidas y transformar la sociedad. La gente tiene que saber que es fundamental ejercer presión sobre los poderes establecidos para abordar las cuestiones que más importan. En definitiva, la gente necesita imaginar un futuro sin guerras, sin pobreza, sin opresión, sin la explotación del hombre por el hombre, en la que la vida sea más libre, justa y humana para todos. Esta es la clase de utopía que persigue el anarquismo. La otra opción es continuar como hasta ahora, en una carrera que probablemente nos conduzca hacia el desastre total.

Vamos, pues, a capear el temporal, y luchar porque vengan tiempos mejores para todos. Tenemos que hacerlo, primero por nosotros mismos, y luego por las generaciones futuras. No podemos permitirnos caer en la desesperación y el desánimo. Ya que estamos vivos, debemos actuar. Y una de las maneras más altas y nobles de hacerlo es por un ideal.

En este momento crucial en que nos encontramos, con una humanidad aquejada por infinidad de males y problemas, en pleno debate por la supervivencia, el anarquismo puede suponer nuestra última tabla de salvación. ¿Y por qué el anarquismo, precisamente? Porque cuando todo va mal y no hay consuelo, solamente nos queda la esperanza de soñar que aún es posible un mundo mejor.
no es un privilegio de la Democracia,
es absolutamente esencial a ella. ».

El Mar

LAMENTO DEL MAR from anabel amiens on Vimeo.
Cuna de vida
Puente de sueños
Y de culturas
Quién lo diría
Que eso fue el mar
Miradle hecho una cloaca
Miradle ir y venir sin parar.
El mar, belleza salvaje,
sabor de sal y de espuma,
Soleados siglos llaman
al reflejo de la luna, El mar,
que si ella falta
ruge en la noche obscura.
Superduque

Era Carnaval
Blanca y Jacinto
Muere por hambre un matrimonio de ancianos en plena “memocracia” española
Seis días solos, sin comida, viendo pasar juntos todos aquellos años donde también existió la felicidad, tristes de verse abandonados por un estado en manos de demonios, una lenta agonía, la que da el morir por inanición, cuando el cuerpo se va degradando, consumiendo lentamente hasta no poder más.
Esos fueron los seis últimos días de Jacinto y Blanca, los dos ancianos muertos por hambre en el barrio de Arenales, Las Palmas de Gran Canaria, un municipio que según su arrogante alcalde del PP, aspira a ser la capital económica del norte de África, sede de las sanguinarias multinacionales de los diamantes y el petróleo.
Jacinto de 75 años y Blanca Nieves de 68, sufrían el tremendo dolor de la miseria, mientras la ciudad celebraba su carnaval del despilfarro, cientos de miles de euros en pan y circo en una isla al borde de la hecatombe social, con más de doscientas mil personas que solo hacen una comida al día, con uno de cada tres niños sufriendo malnutrición y empobrecimiento extremo, cientos de miles de familias sin ingresos, haciendo cola cada día en los bancos de alimentos.
La vergonzosa hipocresía de los políticos criminales del régimen español conduce a millones de personas al abismo de la barbarie, de sufrir el inmenso sufrimiento de Jacinto y Blanca, víctimas de un tipo de terrorismo mas cruel que nadie persigue, que mata lentamente, que asesina entre robos y tramas corruptas, siguiendo los dictados de bandas mafiosas como el BCH, la Unión Europea o el FMI.
Morir de hambre ya es una causa más de muerte en el estado español, los medios de comunicación lo ocultan, como tapan los miles de suicidios por razones económicas cada mes, personas que desesperadas no aguantan más las presiones y el chantaje de la genocida banca usurera, respaldada por políticos corruptos sin escrúpulos para seguir asesinando.
Un recuerdo emocionado a estas personas, a las millones que sufrimos la aberración de un gobierno de psicópatas santurrones, capaces de todo para seguir enriqueciendo a sus putrefactos clanes familiares y empresariales.
Que Dios, en su misericordia les acoja en su seno.
Consciencia planetaria

En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban
sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios
se movía sobre la faz de las aguas.
Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz.
vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas.
Y llamó Dios a la luz Día, y a las tinieblas llamó Noche.
Y fue la tarde y la mañana un día.
Libro del Génesis 1:1-5

Vivimos en un mundo altamente tecnificado y polarizado.
Esta tecnocratización globalizada conlleva tremendas injusticias y enormes
desigualdades sociales y económicas.
Hace poco reflexionaba a partir de la obra del artista y fotógrafo español
Daniel Canogar sobre los excesos a que nos aboca el consumo desorbitado.
Llevamos décadas escuchando eso de “países del Tercer Mundo”, “países en vías
de desarrollo”, “ hemisferio sur” y otros denominaciones similares.